Este viernes pasado tuve la oportunidad de utilizar la combinación iRig + AmpliTube para iPhone, lanzada recientemente por IK Multimedia, durante una breve presentación realizada durante un acto escolar.

 

 

iRig + AmpliTube en acción

Una cosa es probar un nuevo procesador en casa y otra cosa es hacerlo durante una presentación en directo.
A diferencia de lo que algunos pueden intepretar a priori, lo anterior no significa que la prueba realizada en la tranquilidad de un hogar o estudio carece de validez, simplemente se trata de una prueba diferente.
En casa se pueden probar elementos que durante una presentación no se pueden probar – por ejemplo, los ruidos serán mucho más evidentes en casa/estudio que sobre el escenario –, y en el escenario se pueden realizar otras pruebas – por ejemplo, cómo se comporta un equipo con las vibraciones de un escenario o qué sonido ofrece en medio del contexto ruidoso de un ambiente en vivo.

 

La presentación fue breve – sólo dos canciones – pero incluyendo el tiempo de ensayos, utilicé la combinación iRig + AmpliTube, durante más de dos horas seguidas.
Vale aclarar: utilicé el procesamiento en una guitarra electroacústica. Yo no fui el ejecutante sino que me dediqué a las cuestiones de sonido de la guitarra para probar las posibilidades de procesamiento.

 

Una de las impresiones más válidas vino de parte del guitarrista quien al escuchar el nuevo sonido, después de tocar durante unos minutos con el sonido limpio enviado por la guitarra a la consola, me manifestó su agrado por el nuevo sonido de la guitarra luego de conectar AmpliTube.
Como la canción iba a ser ejecutada sólo con guitarra acústica elegí procesamiento estándar asignando en Bypass el módulo Amp y colocando sólo dos efectos: Chorus y Delay.
El sonido obtenido me gustó mucho. No aprecié problemas de ruidos o zumbidos, y por sobre todo, la aplicación se mostró totalmente estable, sin ningún tipo de fallos, algo fundamental considerando la utilización durante una presentación.
Es cierto, iRig no fue diseñado para presentaciones en vivo, pero puedo asegurarles que resultó muy, muy cómodo llegar sólo con mi guitarra, mi iPhone, y un par de cables (para conectar la guitarra al iRig, y para enviar la señal del iRig a la consola).
El resultado fue totalmente satisfactorio. Es cierto que en el ambiente de la presentación, resultó mucho más difícil apreciar las sutilezas que aportaba el Delay, pero su acción podía sentirse más que oirse. Naturalmente, el Chorus resultó mucho más notorio, pero la combinación de procesamiento se escuchó muy bien.

 

Como manifesté en otra entrada, este tipo de recursos en donde se combinan aplicaciones y dispositivos hardware para iPhone cambiarán la manera de entrenar, o incluso de presentarse en vivo.

 

Más info www.ikmultimedia.com

 

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