Pocos temas han hecho correr los rios de tinta que el tema del CANON DIGITAL está produciendo tras su reciente aprobación en el congreso, ríos que sin duda seguirá produciendo por mucho tiempo, porque sencillamente el tema se ha cerrado en falso. Eso sí todos los grandes medios de comunicación se han hecho eco de esta historia, con grandes titulares y portadas, abriendo y llenando informativos, ¿pero alguno se ha preocupado de hacer un análisis en profundidad del asunto? ¿de dar todas las claves al ciudadano para que se forme una opinión objetiva?. Tras muchos meses de tiempos de polarización extrema, corren vientos electorales y todos los medios parecen funcionar movidos por la obsesión mas de «arrimar el ascua a su sardina» que con el objeto de dar una información objetiva y mucho menos proporcionar al ciudadano las claves sin tapujos sobre este controvertido tema. Hay demasiado en juego.

No es mi intención hacer de abogado de ninguna de las posturas polarizadas, pero creo que está muy claro que con el telón de fondo de un millon y medio de firmas en contra del canon, sinceramente no creo que este gobierno haya enfrentado con valentía este asunto, ni ha comprendido la transformación conceptual que la era digital ha dado a muchos aspectos de nuestras vidas, ni por supuesto ha escuchado y ponderado todas las voces, es mas algunas se las ha saltado a la torera, ¿pero por el contrario resulta creible la «oposición repentina» de los populares a esta ley?, ¿quienes habiendo podido hacer no hicieron si no todo lo contrario y justo ahora, en tiempos electorales, que casualidad, se han dado cuenta?. Definitivamente hay demasiado en juego.

Pero estamos en la era digital y podemos acceder a otras muchas voces y fuentes de opinión que, al menos a priori, no están tan condicionadas como otras fuentes necesariamente mas polarizadas, la eclosión de los blogs y otras formas de expresión libre nos dan esa oportunidad, una oportunidad que no podemos desdeñar y que debemos explorar, aunque cueste cierto trabajo, al menos en aras de la mas básica salud mental y la del primordial objeto de formarnos una opinión no sesgada y abierta a todas las claves de este complejo y muchas veces esquivo asunto.

La mayoría de los visitantes de este sitio somos músicos, creadores, productores y esto nos pone en una posición especial respecto a este tema, somos parte especialmente implicada y por eso es mas importante si cabe que no nos detengamos en una sola visión del asunto e intentemos ponderar todos los múltiples factores que intervienen en este complicado asunto.

Hace unos días leía en un interesante blog una reflexión en la que el autor resumía su parecer respecto a que en una de sus vertientes este tema tiene mucho de recambio tecnológico «La gran diferencia es que los fabricantes de neveras jamás pagaron un canon a los vendedores de hielo.» y ciertamente no parece faltarle razón, ¿pero el canon digital solo tiene sentido como compensación a una industria de la obsolescencia de su modelo de negocio? Yo al menos no tengo tan claro que esta no sea una visión reduccionista del problema.

Si coincido sin embargo en esta lúcida afirmación de dicho blog y es que «es más fácil prometer desde la oposición que cumplir desde el Gobierno. No hay nada como tener micrófonos.», como para creer a nuestros políticos, que siga el debate…